En su paso por Maldonado, fue su primera salida a jugar en el exterior, tuvo una lesión en su pierna derecha que no le permitió rendir a pleno pero siempre se contó con su entrega. Demostró mucho carisma, gran contracción al trabajo y se integro muy bien al grupo humano del equipo. Su ida es inesperada, pero entendible por sus problemas familiares y ahora los dirigentes evalúan posibles reemplazos para los que ya tienen varias ofertas. Quedan dos partidos para terminar la fase regular, el sábado ante Flores de visitante y luego ante Albión de local.
Si gana ambos, clasifica al Súper Cuatro donde tres equipos clasificarán para seguir en la Liga Uruguaya de Básquetbol.
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